domingo, marzo 04, 2007

"Convivios" y otras actividades necesarias para diputados y senadores...


Conocí a una chica que trabaja para la Cámara de Senadores mexicana. Más bien, trabaja para los senadores panistas.
A diferencia de Argentina, donde cada senador tiene una buena cantidad de empleados, en México cada partido comparten estructura. No sé cuántos senadores tiene el PAN en este momento, pero pueden ser unos 20. Ellos cuentan con un par de secretarias, asesores, etc.
En el caso de mi amiga, ella se encarga de llevar su agenda, comida (utilizan un comedor del senado), viajes, etc.
Hace poco me contó que organizó un "convivio" de 2 días en un muy lindo hotel a 200 km del Distrito Federal para todos los senadores y algunos funcionarios panistas de primera línea. La idea del convivio era debatir ideas, armar un plan de trabajo... ¡y convivir!
Desconozco como lo manejamos en las diferentes cámaras de diputados y senadores en Argentina, pero pensé que sería una opción muy válida organizar este tipo de reuniones al menos una vez al año, no para un partido en particular, sino para la cámara entera; que peronistas, radicales, seguidores de Carrió, Macri, socialistas... tuvieran que convivir por un par de días en un lindo paraje, discutir ideas para su distrito por algunas horas, y conocerse mejor el resto del tiempo. Me imagino que se dividirían en grupos según edades e intereses (en vez de partidos políticos), estarían los que juegan al truco, al fútbol, los cinéfilos y los que disfrutan de una buena charla con o sin mate... y creo que eso tiraría muchas barreras de comunicación abajo para escucharnos, que es uno de nuestros peores males argentinos.
A nivel nacional, lo imagino cada año realizándose en una provincia diferente, donde los anfitriones intentan superar el convivio de la provincia anterior.
Seguramente no faltaría quién se queje de que fondos públicos se utilicen para actividades de este tipo, pero eso se puede resolver pidiendo colaboración al sector privado de turismo principalmente .
Tal vez te parezca una propuesta demasiado banal, pero de verdad entiendo que no nos sirve de nada quejarnos como ciudadanos del nivel de nuestros políticos, hay que apoyarlos para que realicen su trabajo de la mejor forma posible, porque ya vimos que el "que se vayan todos" no sirvió de nada. Siguen los mismos. Por eso creo que lo mejor es invertir en ellos, brindarles mucha capacitación (cursos, viajes a otros distritos y países para ver cómo resuelven los mismos problemas en otros lugares... ), fomentar una cordialidad interpartidaria para que, a la hora de votar proyectos, actitudes como "no dar quórum" o simplemente ponerse en contra sin proponer se volvieran menos frecuentes.
¿Porqué no institucionalizar cursos de inglés, oratoria, derecho, ONGs, ética... ? Creo que instruirlos llevaría a comprometerlos más con su trabajo y deberes como funcionarios.
La mayoría de los diputados y senadores no llegaron a su cargo por entender ni siquiera las nociones básicas de la administración pública, y sin embargo la necesitan si queremos que su trabajo sea eficiente. Repito: no nos sirve quejarnos, hay que ver cómo sacar el mayor provecho.
Lo ideal sería contar con una plantilla de profesores de primer nivel, de la UBA y las mejores universidades, que pudieran armar cursos y talleres entretenidos donde además de instruir fueran formadores de opinión. Por ejemplo, si hay que debatir una ley de seguridad, ¿qué mejor que traer a los mejores profesionales a que compartan su visión del problema y soluciones? Sería una excelente forma de influir en el resultado de dicha ley.
Mi ecuación sería algo así como: Educación = Conocimiento = Compromiso = Orgullo por lo que uno hace.
En fin, hay mucho por corregir en mi post, y por completar, ojalá ayude a crear un debate...

No hay comentarios.: