sábado, abril 03, 2010

Acerca de un objetivo personal político.

Lo que me gustaría es atraer gente a la política. Me refiero a todas las personas que de por si sienten afinidad a ella, pero por diferentes motivos están alejados. Facebook y otros tantos emprendimientos exitosos han conseguido que la gente quiera publicar sus noticias personales, fotos y videos a amigos que quizá no veían hace años. O sea, Facebook nos ha ayudado, pero también motivado, a retomar contacto con seres queridos en el olvido, y a estar más próximos aún a nuestros afectos actuales. A mí me gustaría ser un Facebook de la política, o sea, un motivador / generador / perfeccionador de la relación de la gente con la política y los políticos. Potencialmente, podemos vivir en un mundo mucho mejor que el actual. Hay varios enfoques para convertirlo en realidad. El mío es involucrándonos mucho más. Creo que el sistema político actual deja a la gente como espectadora, ausente, que sólo interviene en procesos aislados como al votar y con cacerolas. No es suficiente. Para mejorar nuestra día a día podemos actuar de forma activa. ¿Qué ocurriría si gente realmente preocupada por el país, y no por su supervivencia, formara el 30% de la cámara de diputados, de los puestos de carrera en un ministerio, o si el 10% de los padres de una escuela se esforzaran continuamente por la mejora de la misma? Creo que el resultado sería exponencial. Pero, al mismo tiempo, ¿cuántas veces te llegó una invitación para presentar examen a un puesto de carreara? ¿Te enviaron información del proceso que tendrías que llevar adelante para presentarte a senador por un partido? ¿Conocés los estatutos que regulan el funcionamiento de tu universidad?

Para dominar un arte, hay que conocer sus reglas. Si no sabés como funciona una computadora, es difícil que puedas componer música digital. Un buen jugador de fútbol conoce perfectamente el reglamento. Las empresas como Facebook gastan presupuestos millonarios para facilitar el uso de sus herramientas, constantemente se preguntan ¿la gente va a entender cómo funciona esta nueva aplicación? ¿en qué orden debo poner las opciones de un menú para facilitar las respuestas? ¿Qué colores resultan más amigables para que los usuarios sientan satisfacción al participar? En cambio, todas esas preguntas resultan lejanas, incluso vacías en el mundo de la política. No se publica nuestro presupuesto y ejecución en función de que la gente común pueda revisarlo y aportar sus observaciones. No se discute una nueva ley de tránsito en un ambiente 2.0 de participación masiva, donde incluso argentinos viviendo en el exterior podrían aportar qué ventajas ven de leyes extranjeras para el buen tráfico. Ser político es ser un profesional que maneja códigos muy demandantes y que se aprenden a golpes, lo que no favorece que quieras compartirlos con terceros fácilmente. La mayoría de los políticos se hacen de abajo e invierten muchos años para llegar a un puesto interesante, hacen sacrificios personales y se deben traicionar hasta a si mismos para triunfar. Por eso se habla de políticos de raza. Hay que tener mucho cuero para soportar todo eso. El sistema es duro y filtra a los blandos. Si no tenés agallas y estómago, mejor ni te metas. Si ya tenés la seguridad de una gerencia en una empresa: ¿para qué sacrificarte en ese lodo? He aquí el punto: el sistema no te ayuda a que ayudes. El sistema, hecho para supervivientes de la política, te quiere lejos de ella. Los puestos buenos faltan, no quieren más competencia. ¿Qué viene a hacer un recién llegado a un lugar donde un político lleva 15 años intentando acceder? Si tienen que defender ese lugar con los dientes, lo harán. Además, no son como los no-políticos, ellos no saben hacer otra cosa más que política, no los podés dejar afuera porque su futuro económico se acaba. Y todos queremos salir adelante. Y así cada vez el sistema se cierra más: o formás parte de la pirámide política, aceptás sus códigos, hacés una escuela de sacrificios, demostrás lealtades, te ensuciás un poco las manos (justamente para asegurar lealtad), o quedás fuera, del lado de los espectadores, los que votan cada par de años a un club de gente que no pertenecerás… a menos que cambiemos la inserción a ese sistema. ¿Qué pasa si al final, formar un partido barrial no era tan difícil, si con los formularios correctos, suficientes firmas, instrucciones de cómo armar una campaña con pocos fondos, etc., podías presentarte en una pequeña elección y ganarla? ¿Y si, en el caso de tener autoridades escolares deficientes, presentar el caso para que se cambien no fuera la burocracia que imaginamos los que no dominamos ese terreno?

Como decía más arriba, mi objetivo es que los ciudadanos nos acerquemos más a la política. Cada uno desde y en el lugar que más quiera. Hay menos problemas que personas con capacidad para resolverlos. Para llegar a esa situación de no-políticos en la política propongo 2 iniciativas:

La primera es facilitar el acceso al sistema político mediante información, por ejemplo, mediante una página web que tenga formularios y procedimientos para toda nuestra vida cívica. Imagino una Wiki colaborativa, donde tengas la misma información que te pueda dar una web gubernamental (por ejemplo, acerca de los trámites que debés hacer para casarte), pero comentados, con consejos y advertencias para que nada te salga mal. Si la página funcionara realmente bien, hasta imagino que uno pudiera mandar la foto de un agujero en la calle, poner los datos de la dirección, y que la web lo hiciera llegar a la municipalidad correcta, tuviera un seguimiento del trámite, una medición para los días transcurridos hasta solucionarlo, etc. Me gustaría que pudieras preguntarle cosas como: “¿Un comisario se elige o no? ¿Cómo debo hacer para hablar con él? ¿Qué consejos debo seguir para que mi cita con él sea lo más exitosa posible?”; o que pudieras ver qué leyes está discutiendo cada cámara, qué diputados y senadores integran esas comisiones, y los emails y direcciones de ellos para hacerles llegar cartas a favor o en contra del proyecto (creo que un diputado va a votar con más responsabilidad si 15,000 de sus electores le expresan su opinión). También que pudieras ver el historial de votaciones de cada diputado y senador.

Quiero aclarar que la web es una de las formas de ayudar a que la gente participe. Si se pudieran dar más cursos cívicos (primero redactarlos), promover los casos de personas que dieron y dan ejemplo en su comunidad (creo que nosotros no hemos sido tan hábiles como los americanos para generar mitos y difundir a nuestros pequeños héroes políticos).

Lo ideal es que todas estas funciones las tome el mismo estado. Crear un sistema paralelo que se ocupe de acercar a las personas a la política me parece un fin menos logrado. No es que sea malo, simplemente menos eficiente. Ya tenemos 3 poderes más la prensa y las ONGs. No necesitamos otro, ni una nueva ONG, sino mejorar a los 3 actuales. ¿Cómo creo que puedo contribuir, además de difundiendo estas líneas con la ilusión de que inspiren a alguien más, sino con el ejemplo? Ese será el tema de un futuro post.

La segunda propuesta para acercar nuevamente a la gente a la política es promover la empatía. La empatía puede definirse de muchas maneras y ejemplos; a mí me gusta explicarla como “la capacidad de ponerte en los zapatos ajenos”. A veces leemos que hemos dividido al país en 2. Yo creo que lo hemos dividido en unos 2 millones al menos. Cada uno se ocupa de su familia, unos pocos amigos y si mismo, y cada vez la idea de prójimo se vuelve más lejana. El chico que nos pide dinero en la calle es un ser extraño, al igual que el viejo que no tiene quién lo mantenga, o el enfermo que no consigue un donante para sobrevivir. En los países socialdemócratas más desarrollados existe una verdadera voluntad de inclusión de los más desfavorecidos. Acá son tantos que ya no sabemos qué hacer. Y en la medida de que no seamos capaces de entender el sufrimiento de una persona en peores condiciones, más nos va costar salir adelante como país. Si yo, que tengo las condiciones de ayudar a la educación de los chicos más favorecidos, ¿quién lo va a hacer? ¿El “Estado”? (entendido como un ente ajeno, intangible y tranquilizador de mi conciencia) Y si yo no me ocupo, ¿cómo vamos a disminuir la delincuencia, los embarazos no deseados, etc.? Hemos perdido la conciencia de que somos una cadena, y por lo tanto estamos todos encadenados en nuestra suerte como país. Pensamos que el límite, la frontera de nuestra preocupación, está en nuestros seres queridos. El Estado y el país están contra nosotros, nos cagan, o al menos lo intentan. Construir algo todos juntos parece utópico, demasiado complicado, demasiadas opiniones e intereses encontrados.

Yo querría colaborar a difundir la empatía. A Obama le preguntaron: ¿Qué es ser patriota? Y él respondió “Ser empático”. Me pareció brillante. Un argentino es patriota si le importan todos los otros argentinos, si sufre por ellos, si está dispuesto a sacrificarse por ellos, ayudarlos desinteresadamente. De hecho, ser empático me parece la característica más importante de ser humano. Que una mujer pueda llorar ante una cámara de televisión porque una inundación le quitó todo lo que tenía y del otro lado miles de personas que no la conocían lloren desconsoladamente y actúen donando dinero, sangre o frazadas nos hace sentir más vivos que nunca. Preocuparnos por los demás es la mejor forma de preocuparnos por nosotros mismos, y a su vez, aunque sería injusto pretender que los otros “estén ahí cuando uno los necesite”, eso es mucho más probable que ocurra.

Lo difícil es generar un movimiento sincronizado de millones de personas tras ese objetivo, que evite que la gente se desmotive rápidamente. Hay que provocar un cambio de mentalidad profundo, sustentado en el ejemplo claro de las personas públicas (empezando por los políticos).

Pero difícil no es imposible, y yo querría dedicar un gran esfuerzo personal para que esa mentalidad sea la argentina del futuro. Se han analizado 1,000 causas de porqué Argentina es un Estado fallido. Para mí la respuesta ha sido la falta de empatía (no nos faltó talento, ni educación, ni recursos naturales). El siglo XX fue una vergüenza de peleas de unos contra los otros, y el comienzo del siglo XXI nos encuentra igual (dicho tanto por el gobierno como la oposición… es en lo único que estamos de acuerdo: estamos enfrentados).

Si conseguimos tomar conciencia de que ese es nuestro principal problema, estaremos a medio camino de la solución.


Epílogo y Resumen:
Este blog, nacido el 5 de julio de 2006, en mis meses trabajando para una empresa en San Juan de Puerto Rico, debe cambiar. Nació pensado para la Ciudad de Buenos Aires, y con el tiempo fui viendo que las mismas propuestas aplican a las demás ciudades y al país. Su objetivo inicial era el de aportar ideas, algo muy noble. Ahora me resulta imposible hablar del blog sin hablar de mí mismo. Llevo años preparándome para participar y pensando cómo hacerlo mejor. Me gustaría ayudar desde 2 propuestas: acercar la política a la gente, para sumar personas valiosas de todos los ámbitos (el país necesita a su gente más talentosa) y difundir la empatía, entre otras formas con el ejemplo, para salir adelante como país.


Nacerá una nueva industria. Aprovechémosla.

Hoy Apple comenzó a vender la Ipad en Estados Unidos. Una Ipad sería una Asistente Personal Digital, o sea un aparato que no es un teléfono inteligente ni una computadora personal, pero tiene algo de los 2. A mí, la función que más me interesa, es la de leer libros y revistas en formato digital, algo que ya permite la Kindle (de Amazon), pero con limitaciones tecnológicas muy importantes. Voy a aclarar todo esto un poco más ya que es el tema principal del post.
La belleza de una Kindle es que no emite luz, y por lo tanto resulta en una lectura muy descansada, similar a la del papel; la Ipad te va a romper los ojos como cualquier computadora, pero te permite interactuar mucho más con el medio, por ejemplo, incertando fotos, ampliándolas, agregando video, etc. Este segundo tipo de libro electrónico es el que va a resultar triunfante.

Discutir ahora si los libros digitales van a reemplazar a los tradicionales, y lo mismo con las revistas, ya no tiene sentido. VA A OCURRIR. No importa si sos un amante del papel, incluso de la filigrana, del mate de una hoja, del olor de un libro nuevo... quién haya tenido una Kindle en sus manos por 10 horas lo sabe. Con lo errado que puedo estar, mi visión es que en 10 años se van a vender muchos más libros digitales en los países desarrollados, que en papel en el planeta. Pero lo importante no es eso, sino que el libro como tal (leído en papel, papiro, pantalla de computadora o Ipad) va a haber muerto. Ya no vas a leer letras, darles sentido, agregar un poco de imaginación, y listo. Mi visión es que va a nacer una nueva forma de leer. Viajá por un minuto al 2020, situate en un sillón muy cómodo con un ebook en tu mano... estás leyendo un libro de Harry Potter (odioso quizá para vos, pero muy gráfico para lo que te voy a contar), y que la misma cámara de tu PDA (Asistente Personal Digital, por sus siglas en inglés) detecta, por la posición de tu pupila, en qué línea vas de esa página: un ave enorme vuela a pocos centímetros de Harry, y él se agacha asustado... y al mismo tiempo escuchás el ruido de las alas del animal y el salto de Harry al piso. No cabe duda de que el efecto te va a atrapar mucho más en la historia, de hecho tu poder de concentración subirá. Lo mismo ocurrirá si llegás a un momento de terror y escuchás un grito desesperado, y si querés generar suspenso y se escucha una música de fondo acorde... o si en un momento de violencia unas gotas de sangre recorren la pantalla del libro, o en otro de amor los tonos de fondo de tu PDA se vuelven más rosados... las posibilidades son infinitas... En mi opinión, no hay forma de que las nuevas generaciones privilegien nuestra lectura "aburrida" de 5,000 años de historia frente a esta nueva lectura interactiva. Va a ser un bien de consumo de al menos 1,000,000,000 de personas. Eso va a generar varias industrias que hoy no existen y que pueden ser una oportunidad impresionante para desarrollar a nuestra ciudad y nuestro país. Por nombrar algunas:
1) Así como hoy en día existen n softwares para hacer tu propio álbum de fotografías digital, donde agregás música, regulás el tiempo de cada foto, las editas, hacés zoom, etc., se van a crear softwares para editar tu texto (ya sea de revista, libro, mail, carta de amor... lo que quieras).
2) Los libros más leídos van a manejar presupuestos importantes de efectos especiales para libros, al igual que las revistas más importantes para sus revistas. Los argentinos somos muy buenos para la publicidad, siempre se nos reconoce como creativos, más enfocados en ganar premios de publicidad que en vender (o sea, más artistas que marketineros). Veo muchas similitudes entre una industria y la otra... equipos creativos analizando cada frase, cada escena, para ver qué efecto insertar que la complete.
3) Similar al punto 2, pero no exactamente, creo que muchas editoriales podrán optar por tercerizar la edición digital (y preponderante) de sus revistas más vendidas. Eso dará pie a softwares de edición profesionales y a la gente que finalmente debe hacer el trabajo de buscar videos o fotos asociados a una nota, la música que la acompañará, etc.
4) Software de lectura de pupila, y softwares de infterfase entre la lectura de pupila y la edición de texto.

Varias de estas industrias, a hoy, prácticamente no existen (por supuesto que existen editores de texto para periódicos y revistas, pero no al nivel que la demanda exigirá), y al mismo tiempo, no son industrias que tengan grandes barreras de entrada (no se necesitan U$10,000,000 para fundar una empresa de efectos especiales, ni de desarrollo de software... quizá la única entrada complicada sería la de Hardware de lectura de pupila, que ni siquiera mencioné). Los argentinos hemos demostrado talento para desarrollar software y para la creatividad publicitaria, ambas muy importantes para estas nuevas industrias que, en 10 años, serán una realidad tan certera que no deberíamos ignorar. La Ciudad de Buenos Aires puede apoyar activamente dicho desarrollo, y el país más aún.
Es más, estoy seguro que dichas tecnologías serán muy usadas para el aprendizaje. La lectura de pupila va a poder detectar en qué palabra se queda trabado un chico, y se la podrá decir para que continúe, o aclararle el significado si así lo desea. También podrá detectar cuando el chico se haya desconcentrado del texto y empezarle a leer para motivarlo a que retome donde dejó (e incluso marcarlo con un color especial para que no le dificulte encontrar dónde se encontraba). Eso significará mejores alumnos (fundamental para competir en el mundo) y el el adiós a los textos en los cuales aprendimos nosotros. Serán contratos millonarios para asegurarnos que nuestros hijos aprendan mejor inglés, ciencias y cuántos materias sean importantes para su desarrollo. Conozco 2 empresas que venden en U$100 sus textos anuales para escuelas, y eso que no contienen ni siquiera un software... Tan solo un texto que promete ser supurior para el aprendizaje del chico...

Enrique Weber, 3 de abril de 2010
enrweber@yahoo.com.ar
http://mafaldapresidente.blogspot.com/2010/04/nacera-una-nueva-industria.html

lunes, febrero 15, 2010

La audacia de vencer


Acabo de terminar "The Audacy to Win", de David Plouffe, el Director de Campaña de Barack Obama en las elecciones demócratas (cuando le ganaron a Hillary Clinton, nada más y nada menos) y finalmente las nacionales de 2007 y 2008.
David Plouffe sería una versión americana de Durán Barba, pero con menos años en el oficio, aunque tecnológicamente mucho más evolucionado. A nivel estratégico no los podría comparar (ya que de Durán Barba no conseguí ningún racconto en detalle de alguna elección), pero Plouffe me pareció excelente.
Y de eso se trata el libro. No te explican qué tipo de información le llegaba a cada vecino, o cómo organizar realmente una campaña a nivel barrial, los guiones de la propaganda televisiva, etc. Ni cerca. Pero te deja muy claro con qué principios se creó la campaña a presidente, si responder una agresión o no, qué estados pelear a muerte la elección (recordemos que en USA sigue vigente el sistema de electores, donde un candidato gana el 100% de los electores), la forma en que, con ayuda de uno de los fundadores de Facebook, organizaron a la gente para que fundaran sus propios grupos de apoyo en cada comunidad (lo que luego fue MyBO.com), etc.
Hay demasiado para contar, los resultados evidencian la genialidad de la estrategia, un afroamericano, de 2do nombre Hussein, ascendencia árabe, que cuando empezó las primarias estaba 20 puntos atrás de Hillary, ganó por una gran diferencia a McCain (que justamente pareció poco planificador, con muchas decisiones erradas como la de Palin - una gran atracción mediática, pero pobre generadora de votos-).
Me gustaría contar mucho más, pero creo que el libro vale la pena como para que nadie se conforme con una brevísima reseña.

domingo, enero 10, 2010

"¡Es la educación, estúpido!"



El título del post lo estoy robando de Bill Clinton, con su ya famosa "¡Es la economía, estúpido!"

En Outliers, de Malcolm Gladwell hay un capítulo interesante acerca del performance de las escuelas. Menciona KIPP (ya hay 50 escuelas bajo ese programa, y muchas más por abrirse). En las escuelas KIPP los chicos tienen hasta un 60% más de clases que en una escuela normal. Menciona que en el verano, los chicos de nivel socioeconómico mayor, siguen mejorando su habilidad para lectura (entre otras) porque son continuamente estimulados. En cambio, en las clases inferiores, incluso llega a caer. Bajo el programa Kipp los chicos tienen clase de 7:25 a 5PM + extraprogramáticas + sábados de 8 a 2PM + clases durante Julio (tradicionalmente vacaciones de verano en el hemisferio norte).

Los resultados son sorprendentes. Aún estando una parte muy pobre de Bronx, y no teniendo examen de admisión (o sea que no preseleccionan chicos con mejores aptitudes) el 80% de los chicos llega a la universidad, muchas veces siendo el 1ro en la familia.

Con escuelas bajo ese sistema en nuestras villas, donde los chicos aprendan muchos valores importantes (como la recompensa del esfuerzo) podríamos reconvertir la realidad de nuestras villas en 30 años… parece mucho, pero los efectos comenzarían a verse mucho antes. Y obviamente no alcanza con esa medida, pero estoy seguro que las madres de tantos villeros (que si hay alguien indiscutiblemente víctima de esa situación, son los chicos) estarían felices de esa ayuda no asistencial, que sus hijos tengan una oportunidad de oro para salir de la pobreza.

martes, enero 05, 2010

La mente Política


Terminé de leer The Political Mind, de George Lakoff, ayer en la noche, un tanto agradecido por lo repetitivo en sus ideas. Igual me pareció un buen libro para quienes amamos la política.

La idea del libro: ser empático es la forma correcta de gobernar. Qué es ser empático? Responsabilidad individual y social y la fuerza para poder llevarla a cabo.

Tesis (entre otras): el 98% de lo que juzgás, lo hacés a través de métodos no racionales. Tenés marcos referenciales de historias, películas, estereotipos, etc. Esos los usas para entender cada nueva situación.

En ese sentido: ¿Cuáles son los grandes “mitos” argentinos? (el americano: el self made man, por ejemplo). ¿Y los grandes mitos políticos argentinos? ¿Y cuales mitos son vistos reverencialmente como positivos? ¿Es el perón paternalista con la pobreza? ¿Es el Che Guevara? ¿Quedó algo de Frondizi? ¿El menemismo simboliza pizza con Champagne en la gente? ¿Nos llegan personajes “semi-políticos” como Diana, Madre Teresa…? Existe alguna referencia del pobre tipo peleando contra las grandes corporaciones en el inconsciente colectivo argentino? Y si es así, con que acercamiento?

La gente asocia sus creencias políticas a los valores familiares que tuvo. Los conservadores admiran la autoridad superior, la obediencia, las sanciones… así como los padres más autoritarios, que cuidan a la familia del mal exterior.

El nurturant parent model (pág. 81). Cuando te equivocas, mejor intentar compensarlo con una buena acción que castigar. Preocuparte por los otros desde chico.

Las relaciones fuertes entre partes del cerebro. Las metáforas que viviste más tiempo son las que están mejor formadas en la cabeza. Para uno es más fácil entender un gobierno desde el punto de vista de la institución Familia, porque la tiene muy presente, que entenderlo desde otras metáforas. Al tema lo llama “neural mapping”.

Y disculpen que no esté mejor escrito: lo armé de notas que tomé a medida que lo leía. Espero lo disfruten.